¿Cómo hacer un proyecto arquitectónico que enamore a los inversionistas?
La industria de la construcción es una de las más redituables en el mundo, sin embargo, realizar un proyecto de gran escala no es sencillo, pues requiere de la cooperación de muchísimas personas que cumplan con roles específicos.
Uno de los más importantes son los inversionistas. Aunque pueda parecer lo contrario, en realidad se encuentran en una posición delicada, pues deben de ser muy cautelosos al escoger en qué proyectos invertirán su dinero. Una mala decisión puede implicar perder un patrimonio que les ha tomado años construir.
Por ello, no es raro que durante el planteamiento surjan desacuerdos entre los diseñadores y los inversionistas, pues mientras los primeros quieren aventurarse con estilos innovadores y propuestas que privilegian lo estético, los segundos desean “irse por la segura” y eficientizar al máximo la relación costo/beneficio.
Y cuidado con mostrar el más leve signo de duda, porque si tú, como diseñador, no estás del todo seguro de la viabilidad de tu proyecto, es muy probable que los inversionistas decidan no apoyarlo y llevar su dinero a algo más seguro.
Si te ha pasado algo similar, no te preocupes, no eres el único. Estamos seguros de que estás lleno de excelentes ideas, y que sólo necesitas la estrategia adecuada para presentar tus proyectos arquitectónicos de forma que enamoren y entusiasmen a los inversionistas. ¿Empezamos?
Cómo enamorar a los inversionistas
Lo primero y más importante es comenzar con un poco de empatía hacia los inversionistas, y entender que su intención no es ser los mecenas de un arquitecto experimental, sino hacer un buen negocio.
Esto significa que deben estar seguros de que tu proyecto será viable y competitivo comercialmente, de modo que se venda rápidamente y ellos puedan recuperar su inversión y obtener ganancias en el menor tiempo posible.
Lo barato contra lo excelente
Al igual que en muchas industrias, en la construcción hay dos maneras de sobresalir en el mercado:
Ofrecer un producto muy barato, producido casi en serie y que esté al alcance de la mayoría de los potenciales clientes -como los infames fraccionamientos– u ofrecer un producto de excelente calidad y diseño, que a pesar de no ser barato atraerá compradores que entienden que están adquiriendo un patrimonio que incrementará su valor con el tiempo.
En medio de estos polos opuestos están todos los demás enfoques y modos de abordar el diseño arquitectónico. Tú decides hacia cuál te quieres orientar, pero nosotros te recomendamos que apuestes hacia lo excelente.
Diseña para los compradores de nuestra época.
Quizás la mejor estrategia que puedes usar para garantizar a tus inversionistas que tu proyecto se venderá como pan caliente, es orientarlo hacia los compradores potenciales. Haciendo una analogía algo burda: si tu comprador será una mano, tú debes diseñar un guante, no un calcetín.
¿Y cómo sabemos quién es nuestro comprador? Pues muy fácil: en marketing existe un concepto que todos deberíamos conocer: el buyer persona. Este es un retrato estadístico de las personas que comprarán tu producto, no de las personas que te gustaría que lo compraran.
Este buyer persona se construye a través de datos sociodemográficos y estadísticos, y comprenderlo te ayudará a saber qué están buscando esas personas que tienen el dinero y las ganas de invertirlo en tu industria.
El buyer persona varía dependiendo de la zona geográfica, pero en todo México, una tendencia es clara: el relevo generacional ya está ocurriendo y ahora los principales compradores de bienes raíces pertenecen a la generación millennial.
Estos compradores funcionan de manera distinta a la anterior generación. Tienen otras motivaciones y otros deseos y sus criterios de compra son distintos.
Por ello, en un proyecto inmobiliario moderno es imprescindible contar con ciertos elementos que antes se consideraban amenidades o lujos, pero que hoy en día son necesarios, como elevadores, áreas comunes de calidad, estacionamientos suficientes e incluso gimnasios o áreas para parrilladas.
Puedes leer más acerca de este tema en nuestro artículo ¿Qué buscan los millennials en su complejo de departamentos ideal?
Plantea soluciones, no problemas.
Lo último que quieren los inversionistas es tener más cosas de qué preocuparse, así que prepárate para que te pregunten cosas como “¿Cuánto va a costar? ¿Cuánto va a tardar? ¿Qué garantía va a tener?”
La mayor parte de los problemas podrás resolverlos por tu cuenta sin problemas, pero cuando se trata de elementos técnicos como un elevador, lo mejor es recurrir a un proveedor especializado que cuente con los recursos y la experiencia necesaria para ofrecer las mejores soluciones a un precio totalmente viable.
En Vertika somos ese proveedor. Contamos con una amplia experiencia en elevadores de uso residencial y elevadores de uso comercial que han sido instalados en más de 23 ciudades de México.
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